¿Cómo un startup de cinco amigos pasó a facturar hasta 15 millones de euros en su primer año de existencia?

Sin duda esta marca se ha convertido en un referente en España, tanto por sus gafas de sol como el modelo de negocio que eligieron: e-commerce. Estos amigos vieron como trabajando para “knockaround” una marca de gafas con sede en San Diego conseguía unos altos beneficios vendiendo sus productos de manera online. ¿Por qué ellos no con su propia marca? No cabe duda alguna que esta empresa es un gran ejemplo a seguir por todas las personas emprendedoras que quieran triunfar.

¿Qué hicieron para triunfar? Modelos de menos calidad, pero a un precio asequible, estudiando las tendencias de modelos de gafas más vendidas en los últimos años. 

Pero no solo su éxito radica en la utilización de materiales asequibles para ofertar su producto. Recurrir a algo tan necesario como es hoy en día ,el marketing de influencers. Jorge Lorenzo se convirtió en su imagen de marca, un referente español que se adapta perfectamente a los valores de marca que querían reflejar. 

¿Sólo esto? Claro que no.

Sus grandes aliadas para la promoción de sus gafas fueron las redes sociales.  Los creadores de la marca supieron cómo sacarle el máximo partido a “Facebook ads”, una gran herramienta para vender y difundir los productos entre el target.

Pasaron de pagar anuncios de 1 euro al día en Facebook a invertir 10.000 euros diarios, posicionando su campaña de branding de la manera más eficaz y dirigiéndose a chicas jóvenes interesadas en la moda y en el mundo de las influencers, con el fin de crear el efecto boca-oído.

También se dieron cuenta como las imágenes de perros y gatos triunfan más que otro tipo de contenidos, así que ¿por qué no sacarle partido?

Aturdidos por el éxito que recibían de sus contenidos, observaron que el target valoraba lo auténtica que era la marca. 

Desde luego la marca no pasa desapercibida, su campaña del “yeti” fue una de las más aclamadas. Llevaron a la estación de esquí de Formigal a un actor vestido de yeti, ¿para qué? Claro era el objetivo, que la gente se preguntara y viralizara si realmente existía esa figura mitológica. Imaginaos la cara de toda la sociedad y medios de comunicación cuando vieron que el yeti era de Hawkers.

Con todo ello han conseguido crear una comunidad “hawkerianos” y crear experiencia con el usuario, claramente creando contenidos constantemente en sus canales de comunicación online y cada uno diferente.