En realidad, ¿Qué es lo que más nos gusta de Coca Cola? ¿Te has parado a pensar si de verdad es una marca que te identifica?

Normalmente los seres humanos no nos paramos a pensar el porqué de las cosas, y es curioso cuando nuestras neuronas de repente se alinean en una parte del cerebro, donde ponemos en duda algo y entramos en un debate interno que puede durar una milésima de segundo, o todo un buen rato mirando a una esquina de la habitación. Pero lo que suele ocurrir es lo siguiente, que nos damos cuenta de muchas cosas y que acabamos nuestra propia conversación con más dudas de las que empezamos.

Cuando entramos a debatir sobre marcas comerciales y porqué son lo que son, aparecen palabras tan nuevas como antiguos son los términos que las definen como por ejemplo marketing, branding, naming, inbound, brench y un largo etc.

Uno de los casos más conocidos en lo que marcas comerciales se refiere, es el de Coca Cola.

Una empresa que nos ha acompañado durante toda la vida de casi todas las personas que estamos vivas en este momento y eso precisamente no viene de un golpe de suerte, sino de una serie de elementos que se encajaron a la perfección en cada una de las fases de crecimiento de la empresa en cada paso que ha dado en su historia. 

Es de sobra conocido que Coca Cola está en todos los lugares donde vamos, vemos su logotipo en lugares muy concurridos, a la vez que en los lugares más recónditos que nos imaginamos.

Podemos ver la marca en un cartel de un estadio de fútbol de decenas de miles de capacidad o en un cartel de una carretera en la que como mucho pasa un coche cada hora, y eso tiene una explicación lógica en cada caso y detrás hay una estrategia de marketing, perfectamente diseñada por un equipo profesional que ha demostrado a la perfección que sabe hacer su trabajo.

Todos hemos llegado a un bar cualquiera, hemos hecho una parada en una gasolinera o hemos ido a pedir algo a la barra en un concierto y cuando el camarero nos ha preguntado que qué queríamos, se nos ha pasado por la cabeza pedir una Coca Cola.

Ah! esto no es otra cosa que el poder del branding, el poder de haberte condicionado durante años con la idea de que una Coca Cola puede causar el placer que necesitas en casi cualquier lugar y en casi cualquier situación.

¡Bien! y esto ¿porqué sucede?

Pues muy sencillo, Coca Cola se ha preocupado de que nuestro paladar se acostumbre a su sabor y lo identifique con los valores que la marca ha querido transmitir.

En ciertas ocasiones, pedir una Coca Cola nos ha salvado de una situación en la que varias personas nos miraban, incluyendo al camarero, a la espera de que nos decidiéramos a elegir y al no tenerlo claro y sentirnos presionados, nos hemos ido a lo que nos sacaba de una situación incómoda y a la vez sabíamos que cumpliría su cometido de tener algo en la mano y algo que llevarnos a la boca.

Cuando una marca consigue ser nuestra salvadora de cosas así, es que ha conseguido acompañarnos y sernos leal en casi cualquier otra situación, por lo que le seremos fieles el resto de nuestra vida teniéndola en cuenta cada vez que pensemos en consumir algún tipo de bebida parecida.

Todo esto se traduce en una sola cosa… ventas y más ventas, las cuales son la razón de ser de una empresa y por las cuales, dicha empresa puede seguir haciendo que ruede su bola de nieve hasta hacerse tan grande como su estrategia le deje y el consumidor le permita.

Seamos sinceros, una Coca Cola, no es otra cosa que un poco de agua con unos ingredientes un tanto desconocidos para la mayoría de la humanidad, que tiene un color oscuro diferente y quizás, si lo piensas, un poco “desconfiable” siendo algo que te llevas a la boca, te genera una sensación de picor fresco con las burbujas y que si no la tomas fría no tiene el mismo efecto que esperas e incluso es hasta desagradable.

Pero todo esto y alguna cosa que se te estará ocurriendo a ti ahora mismo, se nos olvida cuando nuestro cerebro nos dice que ese color rojo de la botella es nuestro amigo, que ese sabor casi inimitable nos es familiar, que esas letras de la marca las reconocemos y que siempre que le hemos dado un trago, nuestro cerebro nos ha dicho que era un dulce placer muy rápido de disfrutar y un momento de felicidad que pocas cosas nos la generan.

Aún así, Coca Cola ha sabido encontrar en otros productos con los que asegurarse que si alguien se escapaba de tomar una Coca Cola, tuviera cualquier otra opción que elegir, pero siempre creada por la misma marca.

¿Sabéis qué otras marcas pertenecen a Coca Cola? seguro que si haces memoria, puedes acordarte de alguna.. Digamos 4 o 5, pero créeme son muchas más y las vamos a repasar para que con alguna que otra se te abra la boca de asombro ;). Son las siguientes:

• Aquarius
• Nestea
• Bonacua
• Appletiser
• Fanta

¿Sabías que hay aproximadamente casi 10,450 refrescos de Coca-Cola que se consumen cada segundo de cada día, incluyendo Coca-Cola Light, Fanta y Sprite ? El poder del branding.